""- Hola cariño, ¿ qué tal? ¿ qué has hecho?.
Ella no quería mostrar el fondo de su alma al retirar de su rostro las gafas oscuras de sol, pero la educación venció.
No lo podía negar, ni por evidencia y mucho menos sin medios a su disposición, tampoco fuerzas. Sus ojos, en aquél instante eran demasiado honestos. Respondió;
- Llorar, llorar sin por qué, llorar de alegría, llorar por desolación, llorar por pena, anhelo.... llorar con nostalgia y alegría tal vez, quizá.
Y él entonces comprendió y asimiló como nunca antes el potencial del amor que ella le ofrece sin descanso y el calor que emanaba en cada palabra o mirada.
Valoró de verdad las consecuencias de sus gestos, pero no la ausencia de algunas de ellos o palabras tan necesarias como el aire que se respira y se comparte.
En esa misma mañana, unas horas antes....
él había manifestado su estado anímico cargado de nerviosísmo, que, por confianza, descargó desacertadamente con la persona que estaba incondicionalmente a su lado, con ella.
Por la noche, aun sabiendo que había dado su palabra para madrugar, necesitaba reír con mis amigos, recargar pilar. Llegar a la cama y no pegar ojo, no era la mejor solución.
Compartir mi mundo sencillo y lleno de momentos dulces, hacen que la vida merezca la pena. Sea única e irrepetible.
Sí, si no tengo amor soy la persona más activa, estable, cooperante con el mundo.... añado tener buen carácter... pero, si quiero a alguien tanto como para compartir mi mundo y corazón, se estar al lado correctamente; de esa modo me vuelvo la persona más vulnerable que jamás haya conocido.
Esa misma noche al sentarme y sentirme rodeada de ti: bailaban juntos la armonía, el amor, la amistad y conversaciones... sociabilidad platónica en todo su fervor.
Si, que lástima... te marchaste pronto pues había que venir a Madrid, habías ideado de palabra una vez más, un día mágico que nos aguardaba... como ese plato que te ofrecen probar y la boca se te hace agua con solo de pensarlo que se acerca el momento.
Era la feria chica, te respeté en tu ausencia y te quise, deseosa que la luna de chivase en tus sueños que podías confiar a ciegas en mí. Pero tú no lo hacías, como de costumbre...
Me marche en cuanto pude, pero entre la música de la feria pues vivo en frente, y el asma, no podía respirar, no pude dormir. Esa noche lo pasé bastante mal, no quería ir al médico a por un urbasón que era lo que necesitaba en ese momento... pero el no poder cumplir contigo con las ganas que aguardaba, hacía que no despertara en mis pies la fuerza suficiente para acudir.
A las 7 am sonó el despertador ( recordaba a petición tuya haber quedado a las 8 en la cafetería), resposté y conduje mientras me llamabas, al aparcar te mandé un mensaje lleno de ilusión ( lo dudabas? !ya estoy aquí!).
Lo primero que viste fueron mis ojos, tu cara se vuelve infranqueable y seca como la luna sin luz y me dices que me marche a dormir, en mi pesaba mas la ilusión del día contigo. Ibas arañando mi corazón a cada gesto y palabra en ese desayuno.
Llegamos a tu base, ví cada helicóptero y vehículo con entusiasmo, no se te olvide que la emergencia y el servicio VOLUNTARIO forma parte de mi vida.
Sentir que dudan de mí, es lo que peor llevo en esta vida.
Elevaste la voz antes de irte a tus tareas allí, por lo que habíamos ido... el haberme acostado tarde, los ojos y el no responderte a tu llamada al conducir te enojaron, quise salir corriendo sin mirar atrás, pero no soy capaz de tirar la toalla.
Te disculpaste con un beso y me dijiste que me fuera una hora a un centro comercial.... te equivocas, no soy para nada superflua.
Todo cuanto el mundo me ofrece es un manjar para saborear, lo que más me ayuda a encontrarme a mi misma. Me fui con el coche en dirección opuesta, el campo y el sol brillaban a mi merced y los pájaros cantaban para mi alma, a eso le sumo la compañía de mi boli y sentimientos, todo en el mismo son.
Me llamas y regreso a tu encuentro como el flautista de Hamelín, me preguntas: - ¿ qué has hecho?.
Sonrío sin rastro de haber llorado y te hago ver lo magníficamente que me he encontrado en el lago de al lado. Desvío mis necesidades ( miedo, llanto, dolor, emoción..) y me centro en ti con mi amor mas verdadero y mi mejor compañía.
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Y a dos días de mi vigésimo sexto cumpleaños me hallo, me valoro y conozco hasta límites insospechados, así como mis capacidades para bien o para mal. Pero soy feliz.
MI vida es nómada, tal como quiero que sea... tengo tanto para ofrecer amando, pero si me apagas no tendré aceite en el candil de mi llama.
Mi amor siempre lo brindaré a todo aquél que lo necesite, en cada situación extrema sin importal la devolución del favor de salvar una vida. Desecho de mi cúpula todo lo que no lleva implícito la palabra con todo su sentimiento--> AMOR.